Beneficios de la lactancia materna

La lactancia es el periodo en el que el recién nacido consume solo alimentos líquidos mediante el amamantamiento, sistema de alimentación que tenemos los seres humanos por naturaleza, es la forma en que obtenemos nuestro primer alimento tras el nacimiento.

Se trata del primer tipo de alimentación que reciben los recién nacidos, misma que consiste en la toma de la leche materna, mediante la succión de esta que realiza el bebé.

La leche materna es la secreción láctea producida por la madre, se trata de un fluido lácteo altamente nutritivo (cuya composición se va adaptando a las necesidades del lactante, conforme este va creciendo y cambian sus necesidades), la leche se compone principalmente de agua, carbohidratos, azúcares, minerales, proteínas, vitaminas, grasas, enzimas, hormonas, y otros factores decrecimiento (como los factores decrecimiento cerebral entre otros), así como anticuerpos y antígenos que evitan infecciones y varias alergias.

Se destaca que antes de la lactancia propiamente en donde la madre produce leche para el hijo, las madres producen una sustancia denominada calostro, que es secretada en los últimos días del embarazo y los primeros después del parto, que es ingerido por el recién nacido, brindándole inmunización ante patógenos, aporta aminoácidos como albúminas, factores de crecimiento muscular, vitaminas, activa las funciones digestivas de los órganos del recién nacido (glicoproteínas), así como aporta los nutrientes necesarios y primordiales para su vida, siendo que la duración de los calostros, es entre cuatro y cinco días, para luego dar paso a la leche definitiva o leche materna.

La leche materna es el único alimento recomendable para el recién nacido dentro de los primeros 6 meses y si bien, tras ese lapso se puede comenzar a utilizar otros alimentos para reforzar la nutrición del bebé, la lactancia es recomendable por algún tiempo más, tanto por ser una alimentación natural que proporciona los nutrientes y fortalece el sistema inmune del recién nacido, como por el lazo que se crea entre la madre y el hijo.

La lactancia materna es la mejor y más natural forma de alimentar al recién nacido durante los primeros meses de vida.

Los beneficios de la lactancia materna son:

La lactancia materna es el mejor alimento para los recién nacidos.- La leche materna que ingieren los recién nacidos es el mejor alimento para su sistema digestivo que apenas está iniciando a ser utilizado, tanto porque aporta vitaminas, minerales, proteínas, grasas y otros nutrientes, como por que aporta varios factores de crecimiento y hormonas, que desempeñan funciones vitales en el organismo del recién nacido ayudando a la digestión, fomentando el crecimiento muscular y de los huesos, así como el desarrollo cerebro-nervioso del infante. Esto aunado a que las diversas sustancias nutricias que necesita el bebé varían conforme el bebé va creciendo, para aportar los nuevos requerimientos que necesita el recién nacido para desarrollarse, (esto es también influido por los alimentos que ingiere la madre).

La leche materna es un alimento natural, que aporta todos los nutrientes necesarios para el desarrollo físico y mental del bebé, durante los primeros meses de vida, siendo un factor determinante para el desarrollo intelectual del bebé.

Ayuda a un mejor aprendizaje.- La leche materna aporta nutrientes esenciales para que continué el desarrollo cerebral del infante, así como aporta varios factores de crecimiento cerebral que permiten que el niño tenga una mayor capacidad de aprendizaje. Es uno de los motivos por los que se recomienda que los recién nacidos sean alimentados de esta forma natural, pues les permite un mejor desarrollo intelectual que se verá reflejada en el futuro del niño.

La lactancia materna protege al bebé de infecciones.- La lactancia es la forma de alimentación que brinda la madre a su bebé, que previene varias enfermedades, ya que al nacer el hijo no cuenta con un sistema inmunológico desarrollado, capaz de protegerlo de los diversos gérmenes patógenos que se encuentran en el ambiente. La leche materna le proporciona al bebé una inmunidad pasiva previniendo enfermedades, siendo que a través de la leche materna recibe los anticuerpos necesarios para protegerlo de infecciones respiratorias, intestinales y otras afecciones virales y bacterianas. Así también la leche materna le brinda los antígenos necesarios para protegerlo de diversas alergias respiratorias y cutáneas, disminuyendo la gravedad de las posibles alergias y padecimientos como el asma que lo pudieran afectar y enfermarlo a causa de su incipiente sistema inmunológico.

Previene la diabetes infantil.- La ingesta de leche materna es un factor que influye en la disminución del riesgo de diabetes del tipo 1 y 2 en los niños, según indican varios estudios al respecto.

La lactancia materna previene la obesidad infantil.- El amamantar a los niños con la leche materna es un factor que se ha visto previene la obesidad infantil, según lo demuestran los resultados de estudios realizados al respecto.

Mejora el coeficiente intelectual y motriz del bebé.- Varios estudios han demostrado que existe una interrelación entre el periodo de lactancia en niños que son amamantados por sus madres exclusivamente con leche materna durante los primeros seis meses o más y el grado del desarrollo intelectual posterior del niño, así como su desarrollo psicomotriz, siendo que niños que han sido alimentados con leche materna y otros alimentos a los cuatro meses de vida o con otros alimentos (excluyendo la leche materna), tienen un retardo psicomotriz para sentarse, gatear y caminar, así como para varias funciones intelectuales, a diferencia de los bebés que han sido alimentados exclusivamente con leche materna durante los primeros 6 meses o más.

La lactancia materna es ideal para el sistema digestivo del bebé.- La leche materna es el mejor alimento para los recién nacidos al menos durante los primeros 6 meses a un año de vida, tanto por proporcionarle los nutrientes necesarios y ser natural, como por aportar otras sustancias que activan la digestión, como varias enzimas que degradan el alimento y permiten su digestión fácil, siendo que la leche materna es de muy fácil digestión para los recién nacidos, a diferencia de otros alimentos como leches de otros animales, preparados lácteos y sobretodo “leches” vegetales, (en este último caso se destaca que este tipo de productos vegetales, no nutren lo suficiente al niño y su digestión es deficiente, pudiendo ocasionar daños), en cambio la leche materna aporta los nutrientes que el bebé va necesitando conforme se desarrolla.

Remedia la ictericia de los recién nacidos.- Cuando un bebé nace, con frecuencia presenta un trastorno en el cual la piel presenta una coloración amarillenta (ictericia), tanto en la piel como en la parte blanca de los ojos, que es causada por un exceso de bilirrubina en la sangre, y como esta sustancia es procesada y desechada por el hígado, y toda vez que en el hígado de los recién nacidos esta función aún no es eficiente, esta sustancia se acumula en la sangre creando ictericia. La leche materna incrementa la reabsorción de la bilirrubina por el hígado del recién nacido, así como la excreción del exceso, estimulando tanto las funciones hepáticas como las intestinales, ya que aporta varias hormonas y enzimas que estimulan las funciones orgánicas del recién nacido.

Previene la obesidad infantil.- Es un alimento muy nutritivo y natural que aporta lo necesario exactamente para los requerimientos del recién nacido, de una manera tan exacta que aún y cuando el bebé consuma mucha leche y aumente su peso corporal, este peso corporal no llegue a la obesidad (recordemos que la composición de la leche materna varía tanto en relación al crecimiento del bebé como respecto a los alimentos ingeridos por la madre).

La lactancia materna calma al niño.- La lactancia materna, es decir el acto de mamar por parte del niño, libera endorfinas de la madre a través de la leche materna, así como a su vez el cerebro del infante libera endorfinas, que ayudan a tranquilizar a la criatura, es uno de los motivos por el cual los bebés se tranquilizan al mamar además de la ingesta de la leche que calma el hambre.

Crea un lazo entre la madre y el hijo.- El periodo de la lactancia es un tiempo en el cual la madre y el hijo tienen una interrelación directa que crea un lazo de amor y confianza, que repercutirá en el resto del desarrollo del niño y entre las posteriores interrelaciones madre-hijo.

La lactancia materna protege la salud en general del recién nacido.- Son varios los padecimientos que se previenen mediante el amamantamiento de los bebés con la leche materna, es el caso de infecciones de oído, varias enfermedades respiratorias, afecciones cutáneas, diarreas, cólicos, estreñimiento, y se reduce el riesgo de padecer afecciones como diabetes, caries dentales, retrasos motores, obesidad infantil, e incluso el síndrome de muerte súbita, según apuntan varios estudios realizados respecto a dichos padecimientos.

Beneficios de la lactancia materna en las madres.- Amamantar al hijo durante la lactancia es una actividad que trae varios beneficios a la madre, ayuda a bajar de peso, es un alimento accesible que puede suministrar al recién nacido evitando molestias de preparar (alimentos especiales), además varios estudios revelan que esta actividad es un factor que disminuye el riesgo de padecer algunos tipos de cáncer de pecho y de ovarios, gracias a los cambios y “movimientos” hormonales que produce, entre otros motivos.

Además es importante destacar que proporciona también una ventaja económica, ya que se eliminan los gastos de adquirir leche, fórmulas lácteas u otros alimentos.

Es necesario hacer hincapié en que cada bebé es diferente, por ello los horarios de comida son distintos así como las cantidades que requiere consumir. Para que una mujer pueda amamantar, su cuerpo libera grandes cantidades de las hormonas prolactina y oxitocina, esto sucede de manera natural durante el embarazo y el periodo de lactancia o amamantamiento.